¿Qué es WordPress y por qué deberías y utilizarlo?

WordPress se ha convertido en uno de los sistemas de gestión y administración de páginas web preferido por todos los SEO´s, Pues como tal es un sistema que con unos cuantos clics, nos permite tener un sitio web funcional y el cual se puede ir personalizando y mejorando y de hecho, incluso existe plugin para mejorar las ganancias de Google Adsense, optimizar las paginas, imágenes, tiempo de carga y mucho más y por ello, es necesario conocerlo a priori y de eso te hablaremos hoy.

Hey amigos ¿Como van? El día de hoy, como autor de invitado ha venido a dar cátedra de WordPress el máximo programador de la agencia Atypical Digital Citizen. Como tal no es una agencia de marketing, es una agencia especializada en el desarrollo web, de software e ingeniería informática en general. Así que si eres un amante de la programación, sigue su cuneta de twitter dando click aquí y sin más preámbulos vamos al post que nos tiene preparado.

¿Qué es WordPress y por qué deberías y utilizarlo?

En este post, te voy a introducir un poco en el mundo de WordPress. Pero no va a ser el típico post diciendo simplemente que WordPress es lo más maravilloso del mundo y que todo el mundo lo usa porque sí.

Te voy a explicar por qué se debería utilizar y en qué casos (ya que no siempre es la mejor
solución para tus circunstancias), contrastándolo con otras alternativas que existen (de las
que te puedo hablar de primera mano). ¡Comencemos, pues!

¿Qué es lo primero que te encuentras cuando contratas un servicio de hosting y un nombre de dominio?

Si has comenzado en el mundo de las webs, y ya has avanzado lo suficiente como para saber qué es un dominio y un hosting, lo siguiente que te planteas es comprarlo. Y muy bien… vamos allá. Vamos a la plataforma más chula y económica que hemos encontrado, porque hay que entrar en calor y todavía no manejamos mucho del tema.

¡Genial! Pero espera un momento… ¿Por qué cuando entro en mi nueva web, en lugar de cosas chulas me aparece una página de error 404 o una página rara como la de abajo?

Llegados a este punto, es muy probable que no sepas si te han timado o si la cosa está funcionando bien. Pues déjame decirte que no pasa nada, el servidor está funcionando correctamente. De hecho, que puedas ver esas cosas, es muy buena señal.

Deberías preocuparte en el caso de que vieras algo así:

En ese caso, hay algo mal configurado, aunque también es muy probable que la web aun no haya sido levantada para ti, porque puede tardar unas horas (por lo general, no debería tardar más).

¿Por qué estás viendo esto? Te lo voy a explicar de la manera más sencilla que pueda. El hosting es un servidor, es decir, un ordenador como cualquier otro que tiene datos almacenados.
Básicamente, cuando le hacemos una petición, le estamos diciendo “eh, tú, dame este
fichero, por favor”.

Eso ocurre, por ejemplo, cuando le pedimos la homepage de una web. El fichero que tiene su contenido se suele llamar “index.html”.

En otras palabras, que a la máquina le estamos pidiendo “por favor, dame el fichero index.html”.

Luego, tú, desde tu máquina, vas a recibir ese fichero HTML. Tu navegador, que es muy listo, renderizará ese fichero y te lo mostrará muy bonito en tu pantalla.

La idea es que, por defecto, el servidor no tiene nada o, al menos, tiene ficheros que no te interesan demasiado, aunque son realmente importantes para el funcionamiento del sistema.

La cuestión es que ahora que, por así decirlo, tenemos nuestro servidor desnudo, tenemos
que meterle nuestro contenido pero… ¿Cómo lo hacemos?

¿Qué es un sitio web?

Y ahora vamos a lo importante. Has escuchado hablar miles de veces de páginas web, pero casi seguro que no tienes mucha idea de lo que hay detrás de una, a un nivel técnico.

Es verdad, en primer lugar, que solemos abusar bastante del lenguaje y a veces es difícil explicarse, porque parece que web, página web, sitio web, aplicación web… todo es lo mismo, pero en realidad debemos hacer distinciones.

Para este post, cada uno de los ficheros HTML va a ser una página web y el conjunto de todas las páginas web va a ser el sitio web.

Es muy común referirse a “página web” como todo el conjunto de ficheros de un sitio web, pero en este caso prefiero definirlo como he indicado más arriba para que quede más claro.

Por tanto, a grosso modo, un sitio web es un conjunto de ficheros HTML que tú vas solicitando a un servidor. Generalmente, en un sitio web, vas pasando de unos ficheros HTML a otros por medio de
enlaces.

Es gracias a esos enlaces que no te tienes que acordar de las rutas de cada uno de los
ficheros. En otras palabras, el contenido de tu sitio web tiene que estar escrito en ficheros HTML.

Este tipo de ficheros te permite hacer muchas cosas, como definir la estructura, los roles de
los elementos, colocar imágenes, definir botones… Y eso es, en esencia, lo que ves cuando entras en una web cualquiera.

¿Cómo empecé yo creando mi primera web?

Yo soy informático y, aunque no me dedique al tema de la web, manejo del tema y, en el contexto de los negocios digitales, me he enfrentado al dilema de qué utilizar a la hora de crear mi contenido.

Así que te puedo decir por experiencia lo que se puede hacer y cuáles son las ventajas e inconvenientes de cada cosa.

Inicialmente, empecé un proyecto en el que hice todo por mí mismo desde cero.

No me resultó tedioso en exceso, pero lleva su trabajo. Lo primero que hice fue algo así como una ecommerce, básicamente una web de afiliación supercutre y muy centrada en lo de vender productos.

Si bien antes te hablaba de que una página web es básicamente un fichero HTML, hay
cosas que matizar al respecto.

Lo cierto es que el HTML es algo estático. sin embargo, hoy en día, prácticamente nadie hace una web así (solo en HTML), sobre todo cuando haces cosas locas como tener un sitio web y, al mismo tiempo, una aplicación móvil y quieres que la información de todas las cosas esté siempre perfectamente sincronizado.

Esto quiere decir que la información está constantemente editándose y hazme caso… editar un archivo HTML cada vez que quieres cambiar algo es un auténtico fastidio y, a la larga, es una jugada muy mala.

Nota de Joaquin: Hago una pausa para meterme entre estas lineas del post y decir que esto es verdad, pues mi nuevo proyecto de Transfers Plus, es una web en HTML y si es un fastidio actualizar archivo por archivo, pero por ello la optimice utilizando y creando modulos de PHP, sin embargo, no se recomienda hacerlo.

Para evitar esto, con los años fueron apareciendo otras capas por encima del HTML que permiten hacer que su información se actualice de una manera más automática.

En mi caso particular, por ejemplo, utilicé PHP. Básicamente, PHP es un lenguaje que permite crear ficheros HTML al momento.

Esto permite tener toda la información guardada en una base de datos, que es una estructura específicamente diseñada para cambiar de forma constante.

La idea de PHP es leer los datos de una base de datos y luego construir un fichero HTML en base a una plantilla predefinida y luego mandártelo.

Esto es muy potente porque te permite hacer cosas como cambiar la plantilla fácilmente, ya que ahora lo que es el contenido y la estética de la página, son dos elementos completamente separados.

Resumen de cómo hice la web para los que son más técnicos

En un principio, lo que hice fue básicamente seleccionar de Internet una plantilla de HTML que me parecía apropiada a una ecommerce (más bien, a una galería de imágenes).

Sobre esa plantilla HTML, hice un código PHP que generaba todo de manera dinámica, almacenando los datos de los productos en una base de datos.

De este modo, cuando alguien entraba en la web, el código PHP accedía a la base de datos, seleccionaba los datos correspondientes, construía la página HTML y la enviaba.

Y ahora te preguntarás… ¿y cómo metías los productos? Pues para eso tenía que hacer como otro conjunto de páginas especiales que solo se podían acceder con contraseña.

Con esas páginas, podía hacer cosas fundamentales como crear, eliminar, editar o ver información de los productos.

¿Por qué no es recomendable hacerlo como lo hice yo?

La respuesta es muy sencilla: ¿Si hay alguien que ha hecho algo mejor antes que tú, para qué te vas a esforzar en crear tu propio producto, cuando eso no es lo que realmente te interesa?

Primero de todo, es cierto que PHP permite separar la estructura HTML del contenido, pero en mi caso lo había hecho extremadamente dependiente, con lo que es muy difícil de mantener.

Lo segundo es que tú eres la única persona que trabaja sobre ese código. Por tanto, eres la única persona que le puede dar mantenimiento (y no quieras ser la persona a la que le preguntan cuando tienen un problema, sobre todo si la persona que te pregunta eres tú).

Lo tercero es que, como todo producto informático… va a estar plagado de errores y hazme caso… no quieres estar todo el día pensando más en cómo solventar esos errores en lugar de estar creando contenido.

Otro tema muy importante es la seguridad. Es mucho más probable que un código hecho por tú mismo sea más vulnerable que un producto profesional.

Y, por último (aunque seguro que se me escapan muchas cosas más), es muy probable que la calidad técnica de tu página esté muy lejana de lo óptimo (en términos, de nuevo, de seguridad, velocidad, estética de la página, mantenimiento…).

Por tanto, a menos que seas desarrollador web (en cuyo caso, espero que solo estés aquí por mero aburrimiento y por reírte un poco de mi nivel), no te recomiendo crear una web totalmente desde cero.

¿Y qué pinta WordPress en todo esto?

Has escuchado miles de veces hablar de WordPress, ¿A que sí?

Pero seguramente no sabes muy bien para qué sirve. Pues, si has entendido todo lo anterior, ahora lo verás mucho más claro.

WordPress hace básicamente todo lo que intenté hacer desde cero pero de una manera mucho más genérica, por así decirlo.

Es decir, es una plataforma general para crear webs de contenidos. En WordPress, las reglas que explicaba antes siguen aplicando, es decir, que el contenido se almacena en una base de datos y un código PHP construye unas páginas HTML con esos datos y una plantilla concreta.

Ya que está bien hecho (no como mi chapuza), es extremadamente personalizable y todo está muy automatizado, por lo que no es necesario codificar ya que, dicho de alguna forma, la propia plataforma codifica las cosas por nosotros.

De este modo, nosotros solo nos centramos en crear el contenido (que es lo que se almacenará en la base de datos) y en personalizar la web a nuestro gusto. Otra de las cosas fantásticas que tiene WordPress es que te permite ampliar las funcionalidades de una manera muy sencilla por medio de plugins.

Estos plugins son, nuevamente, código que interactúa con la base de datos y, por ende, influyen en el funcionamiento y el cómo se muestra el contenido en la página.

Por tanto, WordPress resuelve muchas de las desventajas de las que hice mención antes. En especial, WordPress nos proporciona una plataforma segura, ya que está hecha por profesionales que se dedican diariamente a mantenerla.

Lo segundo, íntimamente ligado con esto, es que el mantenimiento ya está hecho por otros, de modo que si hay un problema no nos tenemos que preocupar.

Por último, dado que es ampliamente utilizada por muchísima gente, la comunidad que tiene es potente y sus desarrolladores están constantemente trabajando en actualizaciones para mejorar funcionalidades y para resolver posibles problemas.

¿En qué casos se debe utilizar WordPress?

Bien, esta es otra pregunta bastante importante. Es cierto… WordPress es una maravilla… pero no es la panacea.

Es decir, no es como “me pica el pie. Voy a instalar WordPress porque seguro que solventa mi problema”.

WordPress es un CMS, es decir, un “Content Management System” que en castellano se traduce como “Sistema de Gestión de Contenidos”.

Por tanto, WordPress es una plataforma especialmente orientada a webs que se centran en el contenido como es el caso, por excelencia, de los blogs.

Una discusión más profunda en la que podemos entrar es… entonces, si es una plataforma para creación de contenidos… ¿vale para una web de afiliación?

Te puedo decir con mi experiencia, que una web de afiliación (aunque sea de productos de Amazon) tiene que poner un foco muy importante en el contenido, más que en el propio producto.

Gracias a los plugins que te puedes encontrar o, en general, las herramientas para meter enlaces de afiliados en las webs, encaja bastante bien en lo que puede ser el post de un blog, por ejemplo.

Sin embargo, si piensas en algo más estilo ecommerce, encendiendo ya directamente el interruptor en tu mente de tienda online, puede que WordPress no encaje tan bien.

Para WordPress, existen plugins como es el caso de WooCommerce, que personalmente he probado alguna vez.

Es un plugin potente y con muchas extensiones, pero si quieres hacer una ecommerce de verdad, lo más seguro es que te tengas que ir a algo estilo Shopify o Prestashop, que son plataformas especialmente diseñadas para ello.

Sin embargo, WordPress puede estar siempre ahí, aunque sea un poco apartado, en el caso de que quieras complementar una ecommerce con un blog potente. Y antes de que se me olvide… el otro caso principal en el que no conviene tanto utilizar

WordPress es aquel en el que quieras ir más allá de la personalización que te ofrece la propia plataforma.

¿Qué quiero decir con esto? Que no es lo mismo tener una plantilla como pueden tener otras 10 K páginas a lo largo del mundo que tener tu propio diseño y llamar más la atención.

En ese caso, si no te dedicas de verdad al mundo del diseño y desarrollo web o no le quieres dedicar tiempo a estas cosas, lo mejor es que trates de buscar algún profesional que te lo haga al mejor precio

Y esto es todo… ¡espero seguir mostrándote los primeros pasos en WordPress!

Espero que ahora sepas más qué es WordPress y por qué es interesante utilizarlo.

Si este artículo te ha gustado y te ha sido útil, no dudes que te explicaré los primeros pasos
en tu instalación de WordPress para configurarlo como es debido. ¡Hasta el próximo post!